Saludos desde Nosgoth!!! Aquí les traigo más información de la historia de transfondo!!!
En cooperación con LittleEiko
La Caida de los Razielim parte III
La evolución vampírica está más allá de lo que cualquier mortal podría soportar. Con la fuerza de voluntad, Kain había sido capaz de influir en la naturaleza y dirección de este don, una habilidad no compartida por su progenie. El proceso puede tomar días, o puede durar años - mientras mayor es el avance, mayor será el tiempo de permanencia en la gestación y más fuerte será la sed de sangre al avivamiento.
Cuando los últimos de los Razielim - perdidos durante tantos años dentro de la ciudad vampírica subterránea - completaron su metamorfosis, se despertaron en un entorno extraño y con un voraz sed profunda. Este no era el territorio del clan familiar en la que habían entrado en su estado de reposo, ni hubo portadores-de-sangre dispuestos a darles el sustento que tan desesperadamente necesitaban. Numerados en los meros cientos, los olvidados Razielim no tenían conocimiento que ahora representaban todo lo que una vez mantuvo a su orgulloso clan.
Abrumados
por sus impulsos primarios, su único pensamiento de los Razielim era
alimentarse. Sin embargo los medios de la salvación de la purga de su
clan, ahora resultó ser su perdición - la caja fuerte oculta en la que
habían sido enterrados sólo se podía abrir con llaves que pertenecían a
los mayores del clan, ahora muertos. Atrapados dentro y privados de la
sangre fresca que necesitaban urgentemente, su último desarrollo físico -
el don de vuelo - no podía salvarles de su confinamiento ni
aproximarlos a su alimento.
Lejos
de los ojos del mundo, los Razielim estaban enconados en la oscuridad
durante décadas. Privados de sangre y minados de la vida , las formas
hermosas con la que habían salido de su fase de pupa, comenzaron a
deformarse y degenerarse . Una vez que la piel se tornó endurecida y
quitina , los huesos llegaron a sobresalir de sus nuevas alas ,
prestándoles una apariencia más demoníaca que vampírica . Temerosos de
que sus facultades mentales se deteriorarían , junto con su forma
física, los Razielim se quedaron con una solo recurso: tendrían que
abrirse paso fuera.
Poco
a poco, con decisión , centímetro a centímetro doloroso, los Razielim
abriendo más a la pesada puerta de la ciudad subterránea, sus cuerpos en
crecimiento, se tornaron más espantosos junto con su necesidad de
sangre. Tal era la sed conduciéndolos que, cuando uno de ellos vaciló y
cedió, sus hermanos buscaron entre las vísceras, con ganas de chupar lo
que sea, y dejar ir la sangre por sus venas. Sin embargo nada comestible
se encontraba en el interior, por lo que los Razielim afilaron sus
huesos para usarlos como herramientas.
El
tiempo pasó lentamente en la oscuridad, pero por un tiempo inmortal,
era el único recurso de que siempre se podía confiar en abundancia.
Finalmente, los último de los Razielim surgieron en la penumbra de la
ciudad subterránea vampirica. Perdidos , desesperados y con un hambre
voraz, los estragos que los Razielim había sufrido de forma aislada, los
dejaron en condiciones de volar lejos, no tenían atracción por luchar.
Acercarse a su ciencia era inútil, y eran consumidos por la necesidad de
alimentarse, así, tomaron la decisión de enviar una señal para
determinar su paradero y trazar un nuevo curso a casa.
Este
grupo estaba dirigido por un Razielim conocido como Eskandor, uno
elevado de mente que había estado mirando con interés: los beneficios de
unirse a las filas de los ancianos de su clan, ahora humillado y
mancillado por la mano cruel del destino. Al frente de su pequeño grupo
de seguidores al aire libre, por primera vez en siglos , se fueron
volando de su prisión de la montaña. Atraídos por el olor de la sangre
humana , que poco a poco vacilantes se acercaban, a uno de los grandes
asentamientos dominados por una estatua gigante del mismo Kain,
inmediatamente reconocieron que se trataba de Coorhagen.
Lo
que los exploradores Razielim no reconocieron, sin embargo, fue el
estado en que encontraron la ciudad. La ciudad estaba desierta, sus
granjas de sangre estaban vacías y sin vigilancia. Descendiendo para
investigar más a fondo, se encontraron con un pequeño número de
decapitados de Dumahim y Melchahim - sus cabezas en picas y cuerpos
acribillados de flechas, los quemaron a cenizas. Tras una inspección más
cercana, se hizo evidente que todo lo que había ocurrido aquí, debía de
haber sucedido hace poco tiempo, como los jugos vitales aún rezumaban
de los cuellos cercenados de sus brazos hermanos -exhermanos.
Desconcertadoo,
privados de alimento y con fuerza en su defecto, Eskandor llevó a su
pequeña banda de vuelta a la ciudad subterránea. Ahora, con una
ubicación familiar de la que podían navegar, acordaron por unanimidad
viajar hacia el sur, a su territorio de origen de su clan - seguramente
no iban a encontrar respuestas y saciar su sed.
Al
amparo de la oscuridad, que abatió a Coorhagen, significaba la
perdición para ellos también, los Razielim se dirigieron hacia su
territorio, su clan, y la promesa de un refugio seguro. Mientras
viajaban sobre Nosgoth, más deslizándose que volando, con el fin de
ahorrar energía, vieron los incendios que cubrían el paisaje: los
puestos de vigilancia. Una vez que descendieron, advirtieron claramente
que no todo estaba bien en el tribunal de Kain. Del mismo modo que su
fuerza estaba a punto de terminar, los Razielim finalmente llegaron a su
hogar ancestral, cayendo bruscamente del cielo en el patio central.
El
subir a sus pies, los Razielim se sorprendieron al encontrarse rodeado
de caras desconocidas de su tribu: decenas de Dumahim y , por encima de
ellos, no era otro sino el propio Dumah .
El destino, al parecer, tenía una última mano para jugar contra los hijos de Raziel.
Continuará...
La Caída de los Razielim parte IV
El territorio del clan Razielim ahora recibió los últimos miembros de su casi extinta facción nativa. Sin embargo, Dumah, patriarca de la Dumahim, no podía determinar exactamente qué clase de criaturas estaban delante de él - que olía de Vampiro y poseían alas como los ancianos aniquilados del clan Razielim , pero el resto de su forma era tan repugnante que seguramente no podrían haber sido engendradados por su hermano mayor apóstata.
Incluso en su estado muy debilitado, los Razielim advertieron un protocolo adecuado - tal fue el impacto de un milenio en la servidumbre hacia el imperio de Kain. Antes de que Dumah emitiera una orden, Eskandor recompuso, se arrodilló ante Dumah y rápidamente divulgó todo lo que habían presenciado en Coorhagen - los vampiros decapitados, los cuerpos quemados y las jaulas vacías que carecían de ganado humano.
Dumah detuvo su mano . Él
había albergado sospechas cuando los Reavers instalados en Willendorf
no habían podido enviar sus misivas de forma regular, pero se confirmaba
- esto debe ser obra de los seres humanos . En ese momento
, Dumah entendió que la guerra civil de los vampiros había resultado
ser la distracción que los seres humanos habían necesitado para
organizar un levantamiento - uno que debe ser sofocado rápidamente y sin
piedad.
Eskandor , aún ignorante de que él y sus compañeros de clan fueron rodeados por fuerzas hostiles , continuó su relato. Explicó
cómo los Razielim perdidos había despertado de su estado de cambio,
sólo para encontrarse enterrados y obligados...a retomar lentamente su
camino hacia la libertad. Sin rastro de su clan, y de su
propio territorio en manos de los extranjeros, Eskandor suplicó a sus
supuestos aliados la sangre fresca que tan desesperadamente necesitaban,
para no sucumbir a los arañazos de la locura, en los bordes de sus psiques.
El rostro de Dumah nada mostró. ¿Eran estos realmente el último remanente de los más bellos y favorecido de todos los Clanes ? En verdad, el orgullo de Raziel había llegado antes de la caída de los Razielim . ¿Qué debía hacer de estos seres miserables frente a él? Era
evidente que sus alas proporcionarían a los clanes una ventaja única
frente a los miserables humanos, por medio de la muerte desde los
cielos. Si tan sólo eran una abominación a los ojos de Kain ... Por otra parte, sin duda, podrían ser eliminados de una buena vez.
Con un gesto, Dumah ordenó a sus tropas que se retiraran. Dio
a uno de sus ayudantes, instrucciones para que los Razielim estuvieran
bajo estrecha vigilancia, y para que Eskandor fuera llevado a sus
aposentos. A su llegada , se le ofreció, a Eskandor, un suministro escaso de las raciones de sangre. Allí, ante su captor, Eskandor apagó por fin su sed, ruidosamente y desordenadamente; deleitándose con sus apetitos vampíricos. Pero
Dumah sabía que no le daría todo para saciarse - esto era sólo una
probada, la lealtad de Eskandor tendría que ser puesta a prueba antes de
que él y los Razielim pudieran volver a su plena capacidad.
Como
fue recuperando sus sentidos, Eskandor preguntó a Dumah lo que había
ocurrido en los años en que él y sus compañeros de clan, habían pasado
en cautiverio. De inmediato, la guardia personal de Dumah,
se puso en posición de ataque y mostró sus dientes - por primera vez ,
se dio cuenta Eskandor, que él y la vida de sus compañeros de clan
estaban en peligro. Dumah reconoció el miedo en los ojos de
Eskandor - los Razielim no estaban en condiciones idóneas para huir y
así ellos lo sabían.
Ordenando a sus guardias para dejarlos en privado, Dumah procedió a revelar esta historia hasta ahora no contada. Cómo Raziel había traicionado a su amo y señor, Kain , por atreverse a evolucionar más allá de él. Que
este acto de blasfemia había sido una afrenta equivale a la rebelión a
los ojos del Consejo de vampiro y cómo, en su ausencia del emperador, se
habían visto obligados a completar su santa obra. Raziel
había sido un traidor, con la complicidad de los miembros de su clan, y
el Consejo no podía arriesgar a sus clanes en esta herencia del
advenedizo. La purga había sido la voluntad de Kain; ¿Y cómo era que Eskandor cuestionara la voluntad de su dios? El
último de los Razielim explicó, que debían considerarse afortunados de
estar vivos ; sus números escasos no podrían soportar la amenaza
combinada de ambas legiones: Vampiros y los ejércitos humanos
presumiblemente, reunidos mientras hablaban.
Para Dumah , todo esto era cierto. Él
no sintió escrúpulos dejando de mencionar que había sido él y su
hermano Turel, quienes habían echado personalmente a Raziel en el Lago
de Los muertos. Así también , describió la guerra civil que
habían engullido los Clanes: como nada más que la anarquía que se había
producido a raíz de la ausencia de Kain. Nadie más que los lugartenientes había presenciado la ejecución de Raziel, por lo que nadie podía decir lo contrario. Impresionó
a Eskandor cómo el peligro planteado por la Humanidad fue la amenaza
actual, que debía comandar el único foco de la especie vampírica.
Dumah comprendió el valor del honor , la lealtad fue el impulso que unía a cada clan, juntos. Eskandor , le preguntó qué podían hacer exactamente los Razielim para salvar sus pellejos.
Consciente
de que sus compañeros del clan se encontraban en el punto de la locura,
Eskandor juró lealtad a cambio de sustento y seguridad. Dumah
exigió que demostrara su confiabilidad y ordenó Eskandor reunir
información de inteligencia sobre los ejércitos humanos: al resto de su
clan lo mantendría como rehen y con hambre hasta que él volviera. Antes
de que terminara el día, Eskandor había regresado con la palabra de que
las fuerzas humanas montaban un establecimiento en la montaña famosa de
Valeholm .
Dumah se turbó. Envió
un mensaje a Turel y transmitió las conclusiones de Eskandor - si tales
acontecimientos habían superado a Coorhagen y Valeholm, tan
inconcebible como lo fueron , entonces, ¿qué había ocurrido en el
interior del país y más allá? Turel convocó a una reunión
del Consejo vampirico , la primera en siglos, haciendo hincapié en la
gravedad de la situación que enfrentaban colectivamente. Mientras
que los vampiros más jóvenes eran reacios a atender a tal invitación,
Turel fue capaz de apelar a su sentido del deber - a pesar de todo, Kain
nunca habría tolerado un conflicto abierto entre los Clanes, mientras
que la Humanidad se levantaba para hacer una burla de todo lo que había
logrado como emperador.
En
el Santuario de los Clanes, Zephon impulsó la iniciativa instantánea de
asesinar a los vampiros que no tuvieran excusa, pero no podía negar su
valor como tropas especializadas. Melchiah sugirió cómo
incrementar sus tropas, pero con la escasez de los guerreros Razielim,
no se podían permitir ese lujo ... al menos por el momento. Rahab
sugirió que los Razielim atacaran la Ciudadela de los Humanos; pero
Turel no estaba dispuesto a enviar este tipo de tropas tan precarias en
una misión. Después de todo, no se podían confiar del todo,
en los seres humanos, dispersos como estaban con sus cortas vidas y
marcos débiles, al no estar bien preparados para un asalto aéreo cuando
llegaría el momento.
Llamaron rápidamente a una tregua. Los
Clanes se unirían y actuaría contra Freeport, asegurando la parte
occidental de Nosgoth, y el corte de los seres humanos serviría de
suministroal llegar a ellos desde el Gran Mar del Sur. No esperaban que lo que los Razielim fueran a desempeñar un papel crucial en esta misión.Así
que se reincorporaron los Razielim a las filas de las legiones
vampirícas , con Eskandor como su sargento, que dejó claro a su clan que
le debían su vida a la clemencia de Dumah y Turel. La lealtad de los Razielim pronto creció, a pesar de los rumores difamatorios de represalias una vez ganada la guerra.
La
Vanidad de los Razielim no los había abandonado cuando se enfrentaron
de lado a lado con sus hermanos, una vez hostiles, por lo que se cubrían
los rostros horribles con una variedad de máscaras temibles para
asustar aún más a los seres humanos patéticos. Los Razielim
saboreaban su lugar en el campo de batalla - con el paso del tiempo,
les fue mejor en la masacre: ya que serían capaces de regenerar ciertos
aspectos de su antiguo y hermoso aspecto físico , pues drenaban sangre
extra de los humanos extra de la sangre.Ahora, con
el resurgimiento de la Humanidad que unió a los vampiros de Nosgoth, una
vez más , los Razielim demostraron su lugar entre los Clanes, mientras
que participaban en la guerra contra su enemigo común.
